EL ORIGEN
Tablillas de arcilla sumerias contienen una fascinante historia sobre
alienígenas que mezclaron su ADN con el de los primates.
Historias sobre el origen de la Humanidad hay muchas y van cambiando de
cultura en cultura. Sin embargo, entre todos los relatos, hay ciertas
características que se repiten como el mito de un primer hombre y una primera
mujer, la crónica de un diluvio universal, etc. De todas ellas, hay una
sumamente cautivante: La de origen sumerio. Instalados en la confluencia de los
ríos Tigris y Éufrates, en la zona de Mesopotamia (actual Irak), este pueblo,
de origen desconocido, adoraba a unos dioses que procedían de las estrellas,
los Anunnaki.
Su nombre significa, “Los que del Cielo a la Tierra descendieron” y todo
lo que sabemos en cuanto a ellos se lo debemos al fallecido investigador
Zecharia Sitchin, quien tradujo tablillas de arcilla de los sumerios y
descubrió una historia cautivante. Si bien sus detractores alegan que lo
narrado en dichas tablillas sólo son mitos, Sitchin siempre creyó que lo
contado realmente ocurrió. Allí se habla de seres que llegaron a la Tierra hace
muchos miles de años desde un planeta llamado “Nibiru” (mejor conocido como
“Planeta X” o también “Hercólobus”), el cual se aproxima a esta parte del
Sistema Solar cada 3600 años.
La razón, del por qué eligieron nuestro planeta para asentarse, fue que
necesitaban oro en grandes cantidades para calentar su débil atmósfera. Como
Nibiru es un cuerpo celeste helado, necesitaban reflejar los rayos solares para
obtener más calor. Descubrieron que la mejor fórmula para lograrlo era
diseminar oro pulverizado en su atmósfera para que se obtuviera un efecto
espejo.
Cuando llegaron a la Tierra, al principio, edificaron grandes ciudades y
crearon una vasta industria minera. Sin embargo y con el correr del tiempo, los
trabajadores se cansaron de laborar en las minas y realizaron una huelga
generalizada. Una ingeniosa solución la dio uno de sus jerarcas, Enki, quien
usó a los primates terrícolas para realizar experimentos genéticos con ellos.
Así nació Adapa (¿Adán?), el primer prototipo del humano terrestre (¿Homo
Sapiens?) producto de la mezcla de los ADN de primates y de anunnakis.
Con el tiempo, los humanos se multiplicaron y terminaron trabajando en
las minas. Gracias a la ayuda de los Anunnaki, aprendieron a sembrar, se
establecieron en ciudades y crearon templos para adorarlos.
Pese a lo anterior, hubo un buen porcentaje de estos extraterrestres que
no querían a los humanos.
Liderados por Enlil, hermano de Enki, quisieron
borrar a nuestros antepasados a como diera lugar. De ahí la historia del
Diluvio Universal que casi acabó con nuestra existencia… Sin embargo, la
facción que estimaba a los humanos nos ayudó a sobrevivir mediante un arca.
Esta magna historia es aún más larga, pero si quiere saber más detalles,
dejamos a continuación un documental elaborado por David Parcerisa que se ha
vuelto sumamente popular en Youtube.